En el minuto 89, cuando la serie estaba liquidada, los ‘verdolagas’ tenían un penalti a su favor para empatar el juego. Cuando el goleador paisa Jefferson Duque ya había puesto el balón en el punto blanco, Sebastián Viera, arquero y capitán del Junior, tomó la pelota y se la pasó a Jarlan Barrera para incitarlo a que fuera él quien disparara.
Finalmente fue Duque quien cobró el penal y anotó el gol con el cual salvó el honor de su equipo, que más allá de quedar eliminado logró evitar la derrota en su casa.
En la conferencia de prensa posterior al partido, a Viera le preguntaron por ese gesto previo al penalti. «Solo quería que lo pateara él, nada más. Era una buena oportunidad para sacarse la espinita de meterle un gol al Junior, y la perdió», respondió el arquero uruguayo.
Evidentemente, este episodio es uno más en la novela de odio entre Jarlan y el Junior. El capitán de los ‘tiburones’ provocó al actual jugador de Nacional.