El delegado Óscar Cortés también fue castigado
La Comisión Disciplinaria de la Dimayor le impuso una sanción a Millonarios Fútbol Club por el mal comportamiento de su hinchada en el último partido jugado como local, que fue el miércoles contar el Junior.
Terminado el juego, algunos hinchas de Millonarios en la tribuna de occidental baja lanzaron objetos a la zona de traslado apuntando a la delegación del equipo visitante. De hecho, el asistente técnico del Junior, Juan Manuel López, resultó golpeado en la cabeza y fue retirado del lugar en camilla.
Así lo reportaron el árbitro Alexander Ospina, que permitió el juego violento y la pérdida deliberada de tiempo, y el comisario de campo.
Debido a esto, Millonarios fue «sancionado con dos fechas de suspensión parcial de la plaza, tribunas occidental baja norte, occidental baja sur y occidental baja central y multa de diez millones de pesos por incurrir en la infracción contenida en los numerales 1, 4, 5 y 6 del artículo 84 del Código Disciplinario Único de la Federación Colombiana de Fútbol», dice el boletín de sanciones.
También fue castigado de forma individual el delegado de Millonarios, Óscar Cortés. Agredió a Walmer Pacheco, jugador del Junior, pegándole con el antebrazo en la cabeza cuando los equipos iban a los camerinos al final primer tiempo. Fue suspendido por ocho fechas y multado con dos millones de pesos.
También castigaron al Junior, por curioso motivo
El club ‘tiburón’ también fue sancionado por hechos ocurridos contra Millonarios, pero no en el partido jugado en Bogotá el miércoles sino el sábado en Barranquilla, por la fecha 3 de los cuadrangulares.
Antes del partido, el capitán Sebastián Viera entorpeció una actividad de patrocinio. Una empresa de transporte en la que el servicio se solicita mediante una aplicación digital tiene un contrato con la Dimayor para que un carro a control remoto le lleve el balón al árbitro antes del partido. El arquero uruguayo impidió el desplazamiento del carrito, lo cual le impidió al ente rector del fútbol colombiano cumplir su compromiso con el cliente.
El castigo para el Junior fue simplemente una multa de cinco millones de pesos.
