The Last Dance, la serie documental sobre Michael Jordan y los Bulls de Chicago, fue muy exitosa en la plataforma digital Netflix. La crítica que recibió fue muy positiva, por su producción detallada y profundidad temática.
Sin embargo, contenidos tan minuciosos dejan una secuela entre las personas involucradas en el relato. Eso es lo que pasó entre MJ y su gran socio en la cancha, Scottie Pippen.
Según el escritor Sam Smith, la relación entre estos dos fenomenales exjugadores está rota por causa del documental. Ya se rumoraba que Pippen se sentía insatisfecho con el rol que se le dio en la serie porque solo se dedicó a él un capítulo, el segundo.
Pero ahora Smith reveló que el nexo entre ambos se rompió porque Jordan llamó “egoísta” a Pippen al opinar sobre su negativa a saltar al maderamen cuando, en una ocasión, el entrenador Phil Jackson diseñó una jugada decisiva en la cual, ante la ausencia del mítico 23, no fue Pippen sino Toni Kucoc quien haría el tiro definitivo.
El escritor también expuso que la relación entre ellos era ambivalente. Por un lado, “a Scottie le gustaría estar en el grupo de Michael porque, obviamente, estar cerca de Michael significa estar en el centro de atención”, explica Smith. Pero por otra parte, “Pippen nunca se vio a sí mismo como un adulador”, asumiendo que quienes rodean a Jordan lo son.
Detallando que MJ tiende a ver a las personas de su entorno como “ayudantes”, a su excompañero de aventuras en los Bulls “le molestaría, a veces, que Michael lo tratara como algo menos que un igual.
Sin embargo, el periodista no vaticina que la ruptura dure mucho, pues hay aprecio mutuo y ellos van y vuelven en su relación. Amanecerá y se verá si este documental fue para su amistad el último baile.
