Las autoridades del tenis tienen una traba para resolver el problema
Varios jugadores se han quejado de que hay un fuerte olor a marihuana en el Abierto de los Estados Unidos, el último Grand Slam de la temporada, que se juega en el Centro Nacional de Tenis Billie Jean King, ubicado en la ciudad de Nueva York.
Por ejemplo, el alemán Alexander Zverev bromeó diciendo que “la cancha 17 huele como el salón de Snoop Dogg”, en referencia a un rapero norteamericano que ha dicho abiertamente que consume esta droga. “A veces hueles a comida, a veces hueles a cigarrillos, a veces hueles a hierba”, comentó la jugadora griega Maria Sákkari.
La entidad organizadora del evento es la Asociación de Tenis de los Estados Unidos (USTA, por sus siglas en inglés). Consciente de un problema que ya se había percibido desde el año pasado, esta institución investigó el consumo de cannabis en el complejo tenístico, incluso en las tribunas de los estadios.
Pero la búsqueda de los consumidores fue infructuosa. Entonces, se comprendió que el olor era más fuerte en las canchas 9, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17 y 19, que son contiguas al Corona Park, un parque público del distrito de Queens.
Eso permitió comprender que los fumadores de marihuana estaban ubicados en ese sector, que en verano es muy frecuentado por los habitantes de un estado en el cual fue legalizado el consumo recreativo de esta droga desde marzo del 2021.
Aunque el uso de cannabis solo está permitido en privado, la USTA no puede evitarlo en ese parque porque está fuera de su jurisdicción. Como quien dice, las autoridades del tenis tienen una traba para resolver el problema.
