Los Celtics de Boston se consagraron campeones de la NBA tras vencer 4-1 en las Finales a los Mavericks de Dallas. El quinto juego, realizado en el TD Garden, terminó 106-88 en favor de los locales.
El equipo de Massachusetts, que había perdido el partido anterior por un margen muy amplio, se sacudió de esa derrota y ganó con contundencia. De esa forma ratificó su favoritismo al título luego de haber sido la mejor franquicia de toda la temporada.
En un equipo caracterizado por la solidez de su colectivo más que por sus individualidades, la figura de la noche fue Jason Tatum. El alero logró 31 puntos, once asistencias y ocho rebotes. Pero el MVP de las finales fue es escolta Jaylen Brown.
Los Mavericks pagaron la dependencia de su jugador estelar, el armador esloveno Luka Doncic. Aun así, tienen el gran mérito de haber sido campeones de la Conferencia Oeste, producto de haber sido el equipo de mayor crecimiento durante todo el curso.
Los Celtics, que no se coronaban desde 2008, festejan su título 18 para volver a distinguirse en solitario como los más ganadores en la historia de la mejor liga de básquetbol del mundo. Desempatan con su gran rival, los Lakers de Los Ángeles, que tienen 17 consagraciones.
Aparte de Tatum y Brown, para la historia queda un colectivo bien conducido por el joven entrenador Joe Mazzulla, con grandes jugadores como Jrue Holiday, Derrick White, Al Horford y Kristaps Porzingis.
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