Estamos viviendo La Liga más pareja de los últimos años. Seguramente no tiene el mejor nivel, pero sí está llena de emoción. Se necesitaron 37 años para que entre los cuatro primeros equipos de la clasificación solo existieran tres puntos de diferencia a falta de cinco jornadas. Atlético de Madrid, Real Madrid, Barcelona y Sevilla tienen posibilidades matemáticas de ser campeones.
El Real Madrid tiene más dificultades de calendario porque también afrontará los dos partidos de semifinales de la Champions League, el 27 de abril y el 5 mayo. Adicionalmente, los ‘merengues’ no cuentan con una nómina muy amplia para hacer rotaciones, por lo que seguramente tendrán que priorizar el torneo europeo por encima de La Liga.
El Atlético de Madrid fue dejando puntos durante las últimas fechas y perdió una ventaja que alcanzó a ser de 14 puntos sobre el Barcelona y el Real. La debacle de los ‘colchoneros’se agudizó cuando empató el derbi con el Madrid en un partido que tenía controlado. El ‘Aleti’ pudo ganar, pero su técnico prefirió cuidar el marcador metiéndose atrás, y lo que logró fue darle vida a sus rivales.
El Sevilla está haciendo una gran temporada de la mano de Julen Lopetegui. De hecho, con su victoria sobre el Atlético fue el responsable de quitarle a este equipo la diferencia de puntos que todavía conservaba sobre el Real Madrid y el Barcelona, dándole un nuevo aire a La Liga.
Por su parte, el Barcelona ha sido el más beneficiado con esta pérdida de puntos del Atlético y por los dos empates consecutivos del Real Madrid. A estas alturas, ya no tiene que esperar resultados; solo necesita ganar este jueves el partido que tiene pendiente frente al Granada para ser líder solitario y depender de sí mismo para ser campeón de España. Incluso, si triunfa a mitad de semana y administra la diferencia de puntos, podría hasta empatar frente al ‘Aleti’ y seguiría siendo puntero de La Liga.
Volvió la alegría al equipo culé; un Barcelona que parecía tener opciones solo de clasificar a la próxima Champions es hoy el principal candidato para hacerse con La Liga. Si la logra, conseguirá el doblete con la Copa del Rey en una temporada que parecía traumática y en la que ni el más optimista podría haber pensado que iba a conseguir algún título.
Pero el responsable de esta alegría culé no es otro que Diego Pablo Simeone. El ‘Cholo’ tuvo una ventaja de 14 puntos sobre sus rivales y la dejó escapar; pudo sentenciar La Liga hace varias semanas y no tuvo la capacidad para aprovechar que sus rivales vivían un mal momento futbolístico. Dejó valiosas unidades en diferente estadios, no solo contra equipos grandes, haciéndose alcanzable para los catalanes, que ganaron ocho de sus últimos nueve partidos ligueros.
Nada está escrito y todavía pueden pasar muchas cosas porque esto es fútbol y, como hemos visto, los partidos se deben jugar. Solo si el Barcelona gana su partido pendiente podrá montarse en el liderato del torneo; lo cierto es que el equipo de Koeman viene en alza y muy motivado. Ganó la final de la Copa del Rey, y su entrenador recuperó a Gerard Piqué, con quien ha podido utilizar un sistema que le viene funcionando muy bien.
Quedan cinco jornadas apasionantes, y todo puede ocurrir en un torneo que ha sido muy irregular, que pasó de tener un claro dominador a cuatro aspirantes serios por el título. Los hinchas de estos cuatro equipos todavía pueden soñar.
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