El problema se destrabó
La Fifa aceptó la demanda del futbolista colombiano Rafael Pérez en contra de San Lorenzo de Almagro, club de Argentina en el cual jugó el año pasado. En ese contexto, él queda como jugador libre y Junior puede agilizar su inscripción para que juegue el partido de ida de la Superliga contra Millonarios.
El defensa cartagenero solo cumplió su primer año de contrato con el ‘Ciclón’, pero se declaró en libertad de salir de ese equipo porque no le habían cumplido con los pagos. El objetivo de él es jugar en Junior, el club del cual es hincha y en el que ya estuvo exitosamente entre 2017 y 2019.
Pérez le mostró a la dirigencia de la institución barranquillera las evidencias del impago por parte de San Lorenzo. Gracias a eso, los ‘tiburones’ le firmaron un contrato por dos años y anunciaron oficialmente su fichaje.
Pero el conjunto argentino le hizo un pago al futbolista. Con eso alegó que ya quedaba a paz y salvo en los tiempos requeridos para reclamarle que cumpla el año que le resta de contrato o que no se vaya como agente libre sino mediante la transferencia de sus derechos deportivos a través de un pago a San Lorenzo.
El equipo de Boedo se negó a tramitar la documentación necesaria para que el Junior pudiera inscribir a Pérez para la disputa de sus competiciones deportivas. Entonces la dirigencia del club colombiano estaba considerando fichar a otro defensor central.
Pero en la mañana de este miércoles la Fifa aceptó una demanda interpuesta por el zaguero en contra de San Lorenzo por el impago de $668.500 dólares estadounidenses que le deben. Esto no significa que la entidad rectora del fútbol mundial haya fallado a favor del jugador sino que consideró que hay méritos suficientes en los alegatos de Pérez para abrir un juicio.
Pero, mientras ese caso legal se desarrolla, Pérez queda como agente libre y puede jugar en el club con el cual él haya negociado. Ahora bien, hay que hacer un trámite para inscribirlo en las competiciones del Junior, y el club de Barranquilla debería adelantar esas gestiones.
El afán sería porque los ‘tiburones’ quisieran alcanzar a registrar al experimentado zaguero para que esté disponible en el partido de ida de la Superliga contra Millonarios, que será este jueves a las 8:00 de la noche.
Como Junior ya había depositó su contrato con Rafael Pérez en el TMS (Transfer Matching System), la plataforma digital de la Fifa para registrar transferencias de jugadores, el trámite consiste en solicitar la habilitación de Pérez como agente libre. Esta diligencia es relativamente rápida porque la demanda del jugador contra San Lorenzo fue aceptada, pero habría afán porque faltan pocas horas para el juego contra Millonarios.
Otro potencial problema
Ahora bien, según los periodistas Juan Salvador Bárcenas, quien cubre al equipo ‘tiburón’, y Felipe Sierra, experto en el mercado laboral de los futbolistas, el club ‘rojiblanco’ no se apresura a hacer esa gestión.
No se sabe cuál será el fallo definitivo de la Fifa en el conflicto entre Pérez y su anterior club. Si la decisión es favorable al ‘ciclón’, Junior podría llegar a ser sancionado por tener en cancha a un futbolista que tiene contrato vigente con otra institución.
Los castigos podrían ser la imposibilidad de hacer fichajes más adelante, como le pasó al América de Cali por el pleito entre Rafael Carrascal y Deportes Tolima. Otro escenario posible sería la obligación de pagarle a San Lorenzo la cláusula de rescisión del jugador, que es muy alta.
Entonces, Junior quiere blindarse legalmente y, por lo tanto, solo le pedirá a la Fifa la habilitación de Pérez como agente libre cuando tenga la certeza de que ello no puede acarrear problemas u obligaciones legales posteriores.
En ese orden de ideas, este defensa no estará disponible para el juego de este jueves contra Millonarios. Por lo tanto, ante la convocatoria de Brayan Ceballos a la Selección Colombia Sub-23 para el torneo Preolímpico de la Conmebol, el compañero de Jermein Peña en la zaga del Junior en el partido de ida de la Superliga sería el argentino Emanuel Olivera, quien tuvo un desempeño muy bajo el semestre anterior.
