Si alguien la ha pasado mal en este arranque de temporada en la Fórmula 1 es el siete veces campeón, Lewis Hamilton.
El británico se ha visto superado por su compañero de equipo en Mercedes, George Russel, quien muestra un ritmo de carrera superior.
Adicionalmente, pasó de ser uno de los firmes candidatos al título del mundo para estar peleando la parte media de la parrilla.
Y como si no fuera suficiente con eso, es centro de atención por una posible sanción para el Gran Premio de Mónaco.
Con la llegada del nuevo director de carrera, Niels Wittich, habrá más control sobre aspectos que se solían pasar por alto.
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Uno de ellos tiene que ver con la no utilización de joyas al momento de conducir los vehículos, tal como lo suele hacer Hamilton.
El plazo máximo para acatar la regla que está en rigor desde 2005, a pesar que no se cumple del todo, será este fin de semana.
Así las cosas, si finalmente la dirección de carrera se mantiene firme en su postura, Lewis no podrá ser parte del Gran Premio.
Las normas son claras y para poder conducir tendría que despojarse de sus piercings, aretes y demás joyas para subirse al monoplaza.
Sin embargo, Hamilton ha dicho que no piensa cumplirlo y seguirá usando estos elementos en las pistas.