La colombiana puso fin a su carrera con un meritorio 10º lugar en Juegos Olímpicos de París
La golfista colombiana María José Uribe ha cerrado su carrera profesional con una actuación que quedará grabada en la memoria de los colombianos. En los Juegos Olímpicos de París 2024, Uribe se despidió del golf con una destacada participación, logrando un décimo puesto tras cuatro días de competición que hicieron soñar a todo un país.
Uribe llegó a la última jornada empatada en el cuarto lugar, lo que avivó las esperanzas de una medalla. Sin embargo, un desafortunado comienzo el sábado le hizo perder terreno en la lucha por los metales. A pesar de este revés, la golfista se recuperó y terminó con una notable décima posición, con un total de cuatro golpes bajo par, a solo tres de las medallas. Este resultado marcó su mejor desempeño en sus tres participaciones olímpicas.
A lo largo de su carrera, Uribe había enfrentado varios desafíos que afectaron sus planes, como la pandemia de COVID-19 y la maternidad. Su participación en Tokio 2020 estaba prevista como su despedida, pero el mal resultado en esos Juegos y los eventos globales retrasaron su adiós definitivo.
A pesar de que París 2024 era su última competencia, Uribe se mostró contenta por el resultado y por haber podido vivir la experiencia rodeada de su familia y amigos. “Todo esto lo hace todavía mejor. Habría sido más duro no clasificarme y retirarme sin haber podido competir aquí. Pero venir ahora y tener una semana tan buena, y tener aquí a mi familia viéndome pelear por las medallas, estoy feliz”, comentó la golfista en su despedida.
La presencia de Uribe en París también se destacó por sus calcetines con una cara sonriente y los colores colombianos, así como por su gesto de llevar la bandera en la presentación de las jugadoras. Estos detalles, junto con su actuación en el campo de golf de Le Golf National, captaron la atención y el cariño de todo un país.
María José Uribe se despide del golf con una actuación que, aunque no culminó con una medalla, sí lo hizo con dignidad y orgullo. Su carrera, marcada por la inspiración de su ídolo Lorena Ochoa, se cierra con una nota positiva, demostrando que terminar con una buena semana puede ser el mejor adiós posible.