La jornada del viernes en la serie clasificatoria rumbo al grupo mundial de la Copa Davis entre Colombia y Gran Bretaña terminó igualada, con un punto para cada lado. El equipo suramericano es local en el Pueblo Viejo Country Club, ubicado en Cota, municipio de Cundinamarca.
Debido a las amplias diferencias entre los jugadores en el ranking de la ATP, el equipo europeo es claramente favorito a ganar la confrontación. Por eso, que la serie esté pareja de cara al sábado, cuando se jugarán los tres últimos puntos, es relativamente positivo porque el rival todavía no ha sacado ventaja.
El primer partido de la jornada fue muy parejo, y terminó con la victoria del colombiano Nicolás Mejía sobre Daniel Evans. En teoría, este era el punto más ganable para Colombia entre los cuatro de la modalidad individual, pues se enfrentaba la primera raqueta nacional contra la segunda del adversario. Vencer en este duelo era fundamental para que los capitaneados por Alejandro Falla tuvieran opciones realistas de ganar la serie.
El partido terminó 6-2, 2-6 y 6-4 en favor del bogotano. Los dos primeros sets fueron muy disparejos, uno para cada lado. El tercero fue bastante reñido y, cuando parecía que se iba a alargar, Mejía (253 del ranking), le quebró el saque a su rival (30 del escalafón) para quedarse con un sorpresivo triunfo.
Y si el primer punto era el menos difícil, el siguiente era el más complicado de todos los duelos individuales, pues el segundo de Colombia chocó contra el mejor de Gran Bretaña. Como era de esperarse, Cameron Norrie, el undécimo de la clasificación mundial, le ganó en sets corridos (6-2 y 7-5) a Nicolás Barrientos, que ocupa la posición 510.
De hecho, últimamente Barrientos se ha dedicado a la modalidad de dobles. En esta serie juega sencillos porque el mejor tenista colombiano, Daniel Galán, no está disponible por problemas físicos. Entonces Mejía, habitual segundo de Colombia, tomó el primer lugar, con lo cual el jugador caleño se convirtió en la segunda raqueta nacional contra los británicos.
El primer set fue de trámite para Norrie, quien se impuso sin exigirse. Pero en el segundo parcial Barrientos se soltó, se tomó confianza, y complicó a su rival. Empezó perdiendo su saque, pero inmediatamente lo recuperó, y desde entonces estuvo cerca de volver a quebrar para tomar ventaja, pero no lo logró. Esa ineficacia la pagó con una ruptura de su propio servicio y, a la postre, con el partido.
La serie continuará el sábado con el punto de dobles, que debería ser parejo. Hay buenas esperanzas con la pareja integrada por Robert Farah y Sebastián Cabal, pero los oponentes son fuertes, Evans junto a Neal Skupsky.