Tres jugadores lo superan por mucho en esta carrera
Ayer, James Harden tuvo una de las grandes noches de su carrera, anotando 44 puntos. A pesar de que lo hizo contra los Pistons (el peor equipo de su conferencia) Harden tuvo la gallardía de definirse a sí mismo como el Jugador Más Valioso en la rueda de prensa después del encuentro.
Nadie duda que Harden es un jugador increíblemente talentoso, pero esta afirmación simplemente no es cierta, por lo menos no este año.
Veamos las estadísticas. Harden está promediando 25.8 puntos, 8.1 rebotes y 11.2 asistencias por partido. Números geniales. Lo que pasa es que varios de los otros candidatos tienen números mejores.
Nikola Jokic de los Denver Nuggets promedia 27 puntos, 11 rebotes y 8.6 asistencias por partido. Joel Embidd 30 puntos y 11 rebotes. Damian Lillard, de los Portland Trailblazers, un jugador que comparte su posición, promedia 30 puntos y 7.7 asistencias por partido.
Jokic en particular tiene un caso mucho más solído que Harden para reclamar este premio. Juega en una conferencia más competitiva, y le lleva ventaja a Harden en cualquier estadística que no sean asistencias. (Una categoría en la que no tiene que brillar por su posición de centro)
Algo que también perjudica las oportunidades de ser MVP de Harden es el hecho de que forzó su traslado a Brooklyn, haciendo poco esfuerzo al principio de la temporada y siendo un mal compañero de equipo en general.
Harden tendría que mostrarnos algo extraordinario para demostrar que se merece ser el Jugador más valioso.
Milwaukee es el único equipo de la #NBA con un récord perfecto desde el descanso del Juego de Estrellas (7-0).
Giannis es 1 de los únicos 2 jugadores que promedian 25 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias por partido esta temporada (Nikola Jokić). #FearTheDeerpic.twitter.com/UVqi3ERjWW