El deportista sostiene que es inocente
Desde la prisión Brians 1, ubicada en Barcelona, España, el futbolista brasileño Daniel Alves dio su primera entrevista pública en medio de la acusación de violación que una mujer levantó en su contra.
Explicando que sostenía esa charla con Mayka Navarro, periodista del magacín El Programa de Ana Rosa, para tener la oportunidad de que la gente sepa lo que él piensa, ‘Dani’ insistió en su inocencia. «Nunca he hecho daño voluntariamente a nadie, y a ella aquella noche tampoco», aseguró.
En una discoteca muy famosa de Cataluña, Alves entró con una mujer a un baño y tuvo sexo con ella. Mientras que el brasileño asegura que la relación fue consensuada, la denunciante alega que fue forzada.
«No sé si ella tiene la conciencia tranquila, si duerme bien por las noches. Pero yo la perdono. Apelo a su conciencia. No ha habido ni una sola noche que yo no haya dormido tranquilo», declaró el mítico exjugador de Bahía, Sevilla, Barcelona, Juventus, Paris Saint-Germain, Sao Paulo y Pumas.
Luego Alves pasó a explicar su versión de los hechos que son materia de investigación por parte de la autoridad judicial española. «Quiero que conozcan la historia a partir de lo que yo viví aquella madrugada y en aquel baño. Hasta ahora se ha explicado un relato ‘asustadizo’ de miedo y de terror, que nada tiene que ver con lo que pasó ni con lo que hice», contextualizó.
«Yo entré detrás de ella. Ni cerré la puerta con pestillo. La puerta estuvo abierta en todo momento, podría haberme ido porque yo permanecí sentado prácticamente todo el rato sobre la tapa del water (inodoro)», relató.
Después intentó ponerse en los zapatos de la denunciante para tratar de explicar la razón de sus alegatos. «Se me ocurre que hay alguien que le aconsejó mal, que se sintió mal después de hacerlo, que dio un paso adelante y que no ha sabido salir del lío en el que se ha metido y en el que me ha metido», dijo.
Por último, Alves dijo que a su denunciante no le ofrece excusas porque no hizo nada malo. «A la única persona a la que tengo que pedir perdón es a mi mujer, Joana Sanz», dijo el deportista, que no niega la infidelidad.
