La Selección Colombia Sub-17 empató sin goles contra Uruuay en su debut en el Campeonato Sudamericano de la categoría, que se realiza en Ecuador.
El juego inaugural del torneo estuvo marcado por dos cosas: la gran actuación de los arqueros, que tuvieron varias y buenas atajadas, y el pésimo estado de la cancha.
Las constantes lluvias en la región afectaron mucho el estado del césped del estadio Christian Benítez, de Guayaquil. La cancha estaba blanda y muy embarrada.
Esta situación afectó a los jugadores colombianos, que tradicionalmente juegan con asociación de pases y se vieron perjudicados con una cancha donde el balón no rueda bien.
Para colmo de males, en el minuto 84 se fue la luz en el estadio, lo cual detuvo el compromiso por un rato.
En el otro partido del grupo Ecuador, que empezó perdiendo 0-2, terminó empatando contra Brasil con dos goles en los minutos finales.