Luciano Spalletti, el nuevo director técnico de la Selección Italiana de Fútbol, está determinado a devolver al equipo a su gloria perdida, y para lograrlo, está haciendo cambios drásticos en el vestuario. En una entrevista reciente con La Gazzetta dello Sport, Spalletti reveló sus planes para revitalizar el espíritu del equipo, desafiando las prácticas modernas que considera contraproducentes.
La prohibición más llamativa es la de la PlayStation. Spalletti ha decidido que los jugadores de la Nazionale dejarán en casa sus consolas de videojuegos favoritas, optando por crear sus propios juegos de distracción durante las concentraciones. «Les voy a inventar yo un juego en el que pensar para distraerse durante la noche», declaró Spalletti. Esta medida busca fomentar la concentración y el trabajo en equipo, aspectos fundamentales para el éxito en el campo.
Pero la prohibición no se detiene ahí. Spalletti también está restringiendo el uso de los teléfonos móviles durante los masajes y tratamientos, buscando recrear el ambiente de las concentraciones de antaño. El entrenador enfatiza la importancia de valores como el orgullo, la responsabilidad y el trabajo duro, desafiando la cultura de la distracción y la superficialidad que percibe en algunos de sus jugadores.
Spalletti criticó abiertamente el uso excesivo de Instagram y otras redes sociales, argumentando que los jugadores deberían estar más concentrados en el trabajo en equipo y menos preocupados por su imagen pública. «Los chicos de hoy prefieren poner una foto en Instagram con el pelo arreglado antes de bajar la cabeza y trabajar. No son los valores que debe transmitir mi Italia», afirmó el entrenador.
El enfoque de Spalletti es claro: la Selección Italiana está en la búsqueda de la grandeza en el campo, no en las redes sociales ni en los videojuegos. Con la Eurocopa en el horizonte, Spalletti está determinado a construir un equipo centrado en el objetivo de la victoria. Italia enfrentará dos amistosos en la próxima Fecha FIFA como preparación para el torneo, enfrentando a Venezuela y Ecuador en Estados Unidos.
El desafío está lanzado para los jugadores de la Nazionale: adaptarse a la nueva cultura del equipo y comprometerse con el camino hacia el éxito en la Eurocopa y más allá.