Si se descubren dos casos de COVID-19 en un equipo en el Tour de Francia, todo el equipo y el personal serán retirados, pero la carrera continuará. Eso ha confirmado la organización del Tour, la cual dio a conocer el protocolo médico a los 22 equipos.
Por su parte, en Francia hubo 4.771 casos nuevos de COVID-19 el jueves, el mayor aumento desde del final del cierre en mayo. Los ingresos hospitalarios y de cuidados intensivos se mantienen estables. El presidente Emanuel Macron dijo que no se produciría un segundo cierre nacional, aunque las autoridades locales están endureciendo las restricciones.
La UCI creó un estricto protocolo en donde obliga a los equipos a someterse a dos pruebas antes de ir a las carreras, establece reglas sobre el distanciamiento social entre los que están dentro de la burbuja del equipo protegido. Los equipos dormirán en alas separadas de los hoteles y la mayoría ha creado cocinas móviles y comedores para evitar el contacto con otros huéspedes.
De acuerdo con el protocolo del Tour, los equipos pueden reemplazar a cualquier ciclista que dé positivo, con el plazo final de las 10:00 a.m. de la primera etapa del sábado 29 de agosto.
Ya no se permiten autógrafos y selfies, y ASO limita el número de personas en las salidas de etapa y pide a los fanáticos de la carretera que también usen máscaras.
Siguen los preparativos y todo parece estar listo para dar inicio al Tour de Francia, según lo afirma el presidente de la UCI, David Lappartient.
