La llegada de James Rodríguez al Everton no solo estuvo relacionada con el gusto del director técnico del equipo profesional, Carlo Ancelotti, por las habilidades del futbolista colombiano; fue también una astuta movida económica del club inglés.
En primer lugar, el alto salario de James, el jugador que más cobra en la plantilla, se compensa por el hecho que el Everton no pagó a su anterior club, el Real Madrid, para adquirir sus derechos deportivos porque el cucuteño ya había terminado de cumplir su contrato con la ‘Casa Blanca’.
El aspecto contractual ya se conocía. La novedad fue el impacto que tuvo Rodríguez en el mercadeo de los ‘toffees‘. Según Liverpool Echo, diario que cubre la actualidad futbolística de los equipos de esa ciudad, el Everton ha tenido un crecimiento acelerado en su expansión internacional con la llegada del zurdo colombiano.
La jugada del club en Colombia empezó con la contratación de Yerry Mina, ocurrida dos temporadas antes, pero se ha potenciado con James. «Según el socio minorista oficial Fanatics, ha habido un aumento del 3.269 por ciento en la mercancía del Everton ordenada al país desde 2017, y Mina firmó el año siguiente. ¿Desde James? Un aumento de casi el 6.000 %», reportó el medio británico.
El punto de partida fue el anuncio oficial de la contratación de Rodríguez. Ese día se impactó a un público estimado en 400 millones de personas con una estrategia de comunicaciones que implicó, entre otras cosas, llenar lugares icónicos como «Times Square, Miami Beach, Albert Dock y la Torre Colpatria, el edificio más alto de Colombia, ubicado en Bogotá, con todos los tonos de azul cuando su llegada alcanzó una audiencia global».
Finalmente, Liverpool Echo contó que, si bien en el Everton esperaban un rédito económico con James desde el punto de vista del mercadeo, los resultados han sobrepasado las expectativas del club.