Del negocio entre River Plate y el Shenzhen F.C. para transferir a Juan Fernando Quintero del fútbol argentino al chino se viene hablando hace mucho. Pero el fichaje no se ha oficializado, lo cual hacía pensar que había problemas para cerrar el trato o para tramitar la contratación.
Pero ahora surgió un nuevo problema, que para nada está relacionado con River. El equipo asiático anunció el fichaje de Morteza Pouraliganji, un defensa iraní, proveniente del Al Arabi, de Catar.
Con la llegada de este jugador, completamente desconocido en América, el Shenzhen llega a siete futbolistas extranjeros en su plantilla. Según las normas de la Superliga China, este es el tope de foráneos que cada club puede inscribir.
Esto significa que, para que Quintero pueda llegar al Shenzhen, este equipo debe salir de uno de sus jugadores internacionales, para lo cual tiene plazo hasta el 30 de septiembre. De esa manera ‘Juanfer’ sería quien complete el cupo de extranjeros.
Según se rumoreaba, River vendería a Quintero a cambio de diez millones de euros libres de impuestos, y el colombiano ganaría un salario anual de alrededor de cuatro millones de euros. Tal vez esa platica se perdió.
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