La Selección Colombia perdió su primer partido en el Sudamericano Sub 20 frente a Uruguay, uno de los mejores equipos del torneo, sino el mejor.
Los dirigidos por Héctor Cárdenas tuvieron un buen partido, jugaron con una gran dinámica y tuvieron el carácter para luchar y empujar cuando se necesitaba.
Sin embargo, eso no fue suficiente para empatar, porque a este equipo le sobran muchas cosas, pero carece de gol.
La definición sigue siendo el karma de las Selecciones Colombia. Por falta de gol no fuimos a Catar y ahora volvemos a sufrir de la misma enfermedad, una que al parecer no tiene cura en el combinado nacional.
Durante el torneo se ha evidenciado la falta de definición de los delanteros. Tanto Caraballo como Zuleta no son nueves de área y cuando tuvieron oportunidades claras no las han convertido, especialmente Caraballo, quien ha fallado jugadas increíbles que debieron ser goles y subir al marcador.
Frente al equipo argentino nos encontramos un gol con un terrible error del arquero, pero si no hubiera sido por eso, el partido hubiera terminado empatado.
Frente a los uruguayos la selección generó jugadas de gol pero le falta poder de definición y cuando pudo definir, se encontró con una muralla.
Rodríguez sacó dos cabezazos claros que tenían destino de gol y cerró su arco cuando Colombia empujaba por encontrar el empate y lograba meter atrás a los ‘charrúas’.
El técnico Cárdenas cae en los mismos errores que tuvo Rueda con la Selección de Mayores: Nuevamente los técnicos se casan con jugadores que no están en su mejor momento y no logran salir de sus temores cuando se ponen la camiseta ‘Tricolor’.
Caraballo es un buen jugador y seguramente va a meter muchos goles, pero es niño de 18 años que se encontró con la titular por la salida de Duran.
(Santa Fe va por un arquero de Selección Colombia)
Hasta él mismo sabía que venía a la Selección a ser suplente y se ganó el puesto por una necesidad del técnico, por su terquedad dejo por fuera al goleador del proceso de preparación de este equipo.
Tomas Ángel no tuvo la oportunidad de venir a disputar la titular frente a Duran y hoy está jugando con Nacional.
Seguramente un jugador con mucha más experiencia y más partidos de profesional le podría aportar mucho más al equipo.
No creo que se pueda descalificar un jugador por su edad, pero sí se requiere de mucho carácter para triunfar siendo muy joven.
Ya hemos visto casos como el de Pedri y Gavi en el Barcelona y luego en la Selección de España, pero estamos hablando de dos genios del balón que van a dominar el fútbol mundial en unos años.
La Selección no tiene más alternativas en ataque, por lo que nos tenemos más que encomendarnos a la capacidad de Puerta para llegar a gol u que Luna regrese enchufado luego de firmar con el Mallorca y ayude a solucionar la sequía de nuestros delanteros.
Tenemos un buen equipo y una generación de guerreros. Estos muchachos luchan, meten y juegan.
Ojalá la Selección de Mayores tuviera la mitad de la garra que muestran estos muchachos, pero sin gol no será posible seguir avanzando en el torneo.
Estos jóvenes se merecen lo mejor y espero que los delanteros se contagien de las ganas de sus compañeros y tengan una mejor fortuna de cara al gol.
La pregunta que nos debemos hacer es qué pasa con las divisiones menores, por qué no siguen apareciendo grandes goleadores como Falcao, porque tenemos muchos delanteros, pero muy pocos goleadores y frente a esa dificultad, es clave poder trabajar y recomponer el camino para enfatizar mucho más en la fundamentación de nuestros niños y jóvenes.
Además, hay que trabajar mucho más en la técnica y en la definición, pero sobre todo en la confianza.
En redes sociales el papá de Caraballo mostraba la técnica de su hijo y sus goles y es un buen jugador, pero seguramente le ha faltado trabajar la mentalidad que necesita y creer en sus condiciones.
Estar en una Selección Colombia es un privilegio que logran muy pocos y cuando se tiene, hay que aprovechar para consolidarse como jugador y figura.
Tengo la ilusión y la esperanza que este equipo pueda encontrar el gol y así nos dé la alegría de volver a un mundial juvenil.
Saludos,
Mauricio León L.