Ecuador: La falta de ambición los condenó

La timidez de Ecuador lo terminó condenando y quedó fuera del Mundial Catar 2022.

Tuvo todo para clasificarse para la segunda ronda pero no aprovechó sus oportunidades y terminó perdiendo un partido que no podía perder, en el que se jugaba el tiquete y en el que por no salir al frente acabó eliminado.

Ecuador no aprovecho la oportunidad que tuvo de ganarle a Países Bajos y se conformó con un empate, que hoy sabe más a derrota que a triunfo.

Cuando pudo ir al frente y cerrar le partido, decidió conformarse con un empate, frente a un equipo que en la historia es superior a los ecuatorianos, pero que le dio muchas ventajas para que lo liquidaran.

Jugó un muy mal partido y recibió un premio que fue un empate, cuando en realidad pudo perder.

El equipo de Alfaro, fiel al discurso de su entrenador, se replegó y no tuvo más ambición y termino dejando dos puntos que hoy le hacen falta para estar en segunda ronda.

Hoy, cuando todos esperaban que saliera a jugarse su clasificación, prefirió plantear un partido más para empatar que para ganar.

Le dio toda la iniciativa a su rival y trató de controlar el partido, de hecho, estaba cumpliendo con su objetivo hasta que antes de finalizar el primer tiempo Piero Hincapié cometió un penal que le permitió a Senegal pasar al frente en el marcador y poner en duda la clasificación de los sudamericanos.

En la segunda parte y con la obligación de empatar el partido salió decidido. En los 67 minutos se encontró con el premio a tanta presión y al empuje de unos de sus pilares, Moisés Caicedo, que hoy se vistió de goleador.

Pero la falta de ambición del equipo le jugó nuevamente una mala pasada; con el partido empatado y acariciando la clasificación se descuidaron y permitieron que tan solo 3 minutos después de haber convertido les marcan el segundo gol en un mal rechazo de Enner Valencia que aprovecho Kalidou Koulibaly para sentenciar todo  y acabar con el sueño mundialista de Ecuador.

(Senegal y Países Bajos los clasificados del Grupo A)

Con el marcador abajo, los ecuatorianos intentaron llegar al empate, pero el equipo no tuvo la capacidad para reponerse a ese duro golpe.

No tuvo respuesta para ir al frente y darle vuelta al marcador. Un duro golpe, sin duda, del cual no se lograron reponer.

Queda la impresión de que el equipo ecuatoriano pudo dar más y que tenía con qué avanzar a la segunda ronda, pero su falta de ambición y el respeto por sus rivales le termino pasando cuenta de cobro.

La verdad nunca entendí la estrategia de Alfaro de quitarles presión a sus jugadores con un discurso perdedor.

No puedo hablar de lo que sucedía al interior del equipo, pero sí creo que no se pueden manejar dos mensajes, uno a los medios y otro en la interna.

La realidad es que la estrategia no le sirvió y sus jugadores se comieron el cuento y terminaron siendo inferiores a su capacidad futbolística.

Frente a Catar se conformaron con ganar el partido 2-0, cuando podían golear a un equipo amateur.

Además, en el partido más complejo decidieron no ganarlo porque se sintieron inferiores a los Países Bajos y hoy cuando tenían que salir a ganar, tomaron la decisión de no ir al frente y se escondieron esperando lo que hiciera su rival.

Lo que le pasó a Alfaro y a su equipo es el resultado de sentirse inferior y de no tener más ambición; al final lo termino pagando.

Seguramente con un planteamiento diferente y con la convicción de poder ganar los partidos estaríamos hablando de otra historia.

Con dos partidos ganados ya estaba en segunda ronda y hoy quedó eliminado con 4 puntos en un grupo en el que pudo pasar de primero, pero en el que no quiso aprovechar las oportunidades que tuvo para estar clasificado.

El resultado de todo, una eliminación prematura y un tiquete de regreso al Ecuador, dejando la ilusión de muchos fanáticos que vinieron a acompañar a su equipo con la idea de dar una sorpresa y hoy se quedan con las ganas de disfrutar la fiesta mundialista.

Mauricio León L.