Los actos de vandalismo alcanzaron al delantero cafetero
El descenso del Santos el pasado miércoles, causó enfrentamientos entre la afición del club y la policía en los alrededores de Vila Belmiro.
Los aficionados organizados del Peixe entraron en conflicto con la policía, que tuvo que usar caballería, gases lacrimógenos y spray de pimienta para contener la confusión.
Durante los enfrentamientos, algunos fanáticos prendieron fuego a vehículos cerca del estadio, incluyendo un autobús.
Entre los automóviles quemados estaba el de la familia del delantero colombiano Stiven Mendoza y del delegado del partido, Wilson Roberto Santoro.
Mendoza, que no actuó en el juego del pasado miércoles, donde se dio el descenso de Santos, es uno de los dos colombianos que hacen parte del club, así como Alfredo Morelos.
El descwnso de Santos, es un hecho histórico para un club de gran tradición que seimepre había permanecido en la primera división.
Las imágenes captadas al rededor de Vila Belmiro dejaban en evidencia la furia de los hinchas de Santos, quienes atacaban todo lo que se encontraba a su alrededor.
Según informa la prensa brasilera, el saldo sería de 10 vehículos vandalizados después del descenso del club.
Los enfrentamientos y actos de vandalismo demuestran la insatisfacción de la afición con el descenso del Santos a la segunda división y resaltan la necesidad de medidas para garantizar la seguridad en los alrededores de los estadios durante momentos de tensión como este.
El Santos ahora tendrá que lidiar no solo con las consecuencias deportivas del descenso y colaborar con las autoridades para investigar los responsables de estos actor repudiables.
