El jugador se fue del Barcelona
Lo que está pasando con Messi es el reflejo de lo que pasa cuando se toman malas decisiones al interior de una compañía.
Se nos olvida que un equipo de fútbol es una empresa y que no se puede manejar sin un direccionamiento estratégico y eso fue lo que paso con la salida de ‘Leo’.
Muchos le echan la culpa a Messi porque no se bajó el salario antes, que si tanto quiere al Barcelona podría jugar gratis… pero no entienden que existen normas que se deben cumplir para garantizar el fair play financiero de los equipos.
Lo que se les olvida es que la verdadera ruina del Barcelona no la provocó Messi. La crisis que está viviendo hoy el equipo es el resultado de las malas decisiones tomadas por las ultimas dos direcciones, quienes se dedicaron a administrar mal los recursos del club y realizaron pésimas contrataciones, con jugadores mediáticos por los cuales pagaron valores escandalosos y que no han podido demostrar su precio y han llevado a la ruina del club catalán.
La crisis se remonta a la salida de Neymar, la venta más alta de cualquier club en el mundo; el PSG pagó 220 millones de euros por el brasileño, toda una fortuna que debió ser invertida de manera estratégica para reforzar las zonas críticas del equipo.
Sin embargo, los directivos se dedicaron a traer figuras como Dembelé y Coutinho por quienes pagaron un mayor valor, teniendo en cuenta que todos los equipos sabían cuánto había ingresado el Barcelona y no iban estar dispuestos a rebajarle un solo euro.
De hecho, pusieron unos precios exorbitantes por sus figuras, pero a pesar de esto los directivos ‘culés’ aceptaron y negociaron sin pensar en el futuro. Luego vinieron De Jong y Griezmann…
Lo cierto es que el club ha gastado entre 2014 y 2019 alrededor de mil millones de euros en transferencias, algo que ningún club ha invertido en ese periodo de tiempo.
Cuando se mira el desempeño de los que llegaron, el único que ha cumplido con la expectativa es Frankie de Jong, por quien se pago el doble del valor de mercado, pero ha demostrado que es un gran jugador que está llamado a convertirse en el líder del mediocampo ‘culé’.
El resto de los refuerzos siguen en deuda y será muy complicado que algún club se interés por ellos, debido al salario que tienen.
Pero volvamos a ‘Leo’. Sigo pensando que cualquier valor que se pague por Messi es bajo comparado con lo que representa para el club.
Ha sido y seguirá siendo el jugador que vende el mayor número de camisetas a nivel mundial, es el hombre que atrae a los patrocinadores y el que permite que la liga de España cobre ese valor por sus derechos de transmisión.
Decir que los problemas económicos del Barcelona son culpa de él es un absurdo, porque ellos bien saben que cada euro que se invierte en Messi se recupera.
El problema ha sido la falta de criterio con el que se ha manejado el equipo. Yo no puedo tener un jugador con el salario de Leo y rodearlo de futbolistas con sueldos que el club no podía asumir.
Es cierto que la pandemia afecto los ingresos, pero la realidad es que solo el 15% de la deuda actual es consecuencia del COVID-19, por lo que el fondo del problema está en el pésimo manejo que le dieron Rosell y Bartomeu al equipo.
El mal está hecho y la decisión que tuvieron que tomar Messi y Laporta fue que el ‘crack’ argentino se marchara porque no era posible inscribirlo, a pesar de todos los esfuerzos que se hicieron por bajar la masa salarial.
El tema es que las demás figuras del club se debían bajar su salario y otros salir, algo que no se pudo lograr porque jugadores como Umtiti y Coutinho no han querido dejar el club.
Messi salió por la puerta de atrás, algo que no debía pasar. Tenía que salir como un grande, como el mejor jugador en la historia del Barcelona, con una despedida como la que tuvieron Iniesta y Xavi.
Pero por el contrario, tuvo que salir a una rueda de prensa a explicar por qué se tenía que ir, algo que no era necesario porque ya el Barcelona sabía que no lo iba a poder inscribir.
Creo que Laporta se jugo la última carta presionando a la Liga y especialmente a Tebas para que cediera y cambiaran la norma y de esta forma garantizar que ‘Leo’ se pudiera quedar.
Infortunadamente le fallo el cálculo porque al frente de la federación española está un hombre prefiere poner su orgullo por encima y ver cómo la Liga cada vez se desvaloriza y cae como una de las de más bajo nivel en Europa.
Qué triste que el mejor del mundo saliera de esa forma del club de sus amores.
Mauricio León L.
