Pasó de ser una joya del fútbol a ser un joyero
Juan Pablo Pino fue uno de los mayores talentos del fútbol colombiano en el siglo XXI. Su irrupción con el Deportivo Independiente Medellín y su descollante actuación con la Selección Colombia en el Sudamericano Sub-20 de 2007 despertaron muchas expectativas.
Pronto se fue a Europa para jugar el Mónaco, pero su carrera como la gran estrella que prometía ser se fue estancando. Su indisciplina, principalmente excesivo consumo de alcohol, le impidió brillar como se esperaba.
Después del Mónaco cambio once veces de club; nunca se afianzó. Terminó su carrera deportiva en el equipo de su ciudad, el Real Cartagena, en 2021.
Ahora, según lo compartió en redes sociales, se ha dedicado al negocio de las esmeraldas, que es uno de los productos de mayor exportación de Colombia por la abundancia y calidad de minas que hay en el país.
Pino no especificó exactamente a qué se dedica dentro de esta industria. Pero podría decirse que pasó de ser una joya -del fútbol- a un joyero.
