Simplemente la Premier de Inglaterra

El torneo tuvo una apasionante definición, acorde a las expectativas

El final de temporada en Premier League fue espectacular y haciendo honor a los quilates que tiene esta liga, nos regalo dos partidos vibrantes que se disputaron como auténticas finales, en los que los equipos visitantes pusieron en problemas a los favoritos y los hicieron sufrir más de la cuenta para poderlos derrotar como se esperaba que debía pasar.

El City se vio sorprendido por el Aston Villa y tuvo que recurrir al amor propio para darle vuelta a un partido muy complicado en el que estuvo abajo y muy cerca de perder el campeonato.

Los ‘Reds’ también sufrieron para darle vuelta al marcador en un juego en el que comenzaron perdiendo muy rápido frente a los Wolves y que luego pudieron remontar en busca del anhelado título de la Premier.

La alegría duró muy poco para el Liverpool, porque, aunque Salah convirtió el gol de la victoria, al mismo tiempo supo que el City ya le había dado vuelta al marcador y tenía la liga en su bolsillo.

Los ‘blues’ sufrieron y se vieron muy lejos del nivel futbolístico con el que lideraron toda la temporada, pero apareció algo que no tuvieron en la Champions frente al Madrid y que al parecer fue una lección aprendida de su rival.

(Luis Díaz no se la cree en la final de la Champions)

Entendieron que podían luchar por el partido y con el apoyo de su público se fueron en busca de la victoria. En 5 minutos dramáticos le dieron vuelta al marcador y conquistaron su sexta corona.

La locura en estos dos partidos fue total, goles de un lado y otro y celebración por los tantos conseguidos en contra de su rival.

En las tribunas se veía cómo los aficionados ‘reds’ celebraban por los dos goles de los ‘villanos’, especialmente el segundo que fue obra de Coutinho y los aficionados ciudadanos enloquecieron con el tempranero gol de los ‘lobos’.

La entrega fue total y tanto el City como el Liverpool hicieron lo que tenían que hacer para quedar campeones.

Al final lo logró el equipo que dependía de sí mismo y aunque lo sufrió, tuvo la personalidad para ir al frente y no permitir que le arrebataran una liga que había trabajado y luchado y en la que alcanzó a tener 15 puntos de diferencia frente a su contendor principal.

Los de Guardiola evidenciaron nuevamente falta de concentración y volvieron a las lagunas de la temporada pasada.

Está claro que sin Rubén Díaz es un desastre atrás, la inseguridad de Laporta y Fernandinho de central improvisado no son prenda de garantía para un equipo que da muchos espacios cuando no tiene el balón.

Lo que no les falto fue carácter para ir a buscar un partido que estaba muy complicado y que solo con la entrada de Gündogan se pudo resolver.

No entiendo cómo un jugador como el alemán no puede tener un puesto titular dentro de este equipo; la dinámica de juego y lo que aporta es impresionante.

Gündogan pasó de ser el mejor la temporada pasada a convertirse en alternativa en un medio campo plagado de estrellas, pero que carece de un jugador con esa personalidad.

La Premier no defrauda y sigue siendo el mejor torneo de clubes del mundo, los partidos se viven con una intensidad que no se ve en ninguna liga.

Ahora tiene el dramatismo de los mejores torneos, no le falta ningún condimento para asegurar que acá juegan los mejores equipos del planeta.

Muchos no están de acuerdo con la forma como Pep a construido este equipo, sin embargo, no creo que sea el culpable de contar con semejante chequera.

Lo que no se puede desconocer es que ha logrado consolidar un conjunto que juga muy bien al fútbol y que ofrece un gran espectáculo.

Es cierto que no tiene jugadores que vengan de la cantera o formatos en el equipo, pero no se puede desconocer que pudo consolidar un gran proyecto que muchos admiramos.

Este año el City y el Liverpool nos han mostrado lo mejor del fútbol, ya uno ganó la Premier y espero que el otro gane la Champions, demostrando que era el mejor del torneo.

Mauricio León L.

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