Tras un final de año con dudas y sin encontrar su juego, el Barcelona ha tenido tres victorias en línea en el comienzo de 2021. Lo mejor es que ha vuelto a desplegar parte del fútbol que lo consolidó como uno de los mejores equipos de Europa. El responsable de este cambio de imagen es Pedro González López, mejor conocido como Pedri. Con apenas 18 años se está convirtiendo en el timonel del Barcelona y en el socio que tanto añoraba Lionel Messi.
Hace tan solo un par de semanas veíamos como el Barcelona sufría para ganar un partido y no encontraba por ningún lado su fútbol. Se miraba a Ronald Koeman preocupado por la falta de juego de su equipo y cuidando el marcador cuando lograban anotar; hasta se le notó cerrando los partidos con línea de cinco defensas, algo impensable para un equipo como el catalán, acostumbrado a derrochar buen fútbol.
Con Coutinho lesionado nuevamente y con la necesidad de ganar los partidos que tenía para ponerse en carrera por La Liga, apareció un menudo jugador con el talento suficiente para liderar al Barcelona y con la personalidad para convertirse en el socio ideal de Messi. Pedri asumió el reto y el comando del medio campo del equipo culé, organizó a su equipo y puso a jugar a sus compañeros. Como si fuera poco, entendió la forma de jugar junto a Messi y, mejor aún, de hacerlo jugar a él. Esto no se había visto durante esta temporada puesto que Jordi Alba ha estado lesionado y lejos del nivel de las temporadas anteriores en las que jugaba de memoria con ‘Leo’ y se convertía en su mejor asistidor.