Los Brooklyn Nets fueron eliminados en un juego 7 apasionante

Hubo dos factores importantes que les jugaron una mala pasada a los Nets: las lesiones y los ajustes ofensivos de los Bucks. James Harden, la segunda estrella del equipo, se perdió los juegos 2, 3 y 4 y jugó el resto de la serie con una lesión en el muslo que lo debilitó visiblemente. Por su parte, Kyrie Irving, la tercera estrella, se lesionó el tobillo en el juego 4 y no jugó el resto de la serie. Sin estas piezas clave, la ofensiva de los Nets se debilitó notablemente.

Por otra parte, los ajustes ofensivos de los Bucks, los ayudaron notablemente a superar a sus rivales. Giannis Antetokounmpo, la estrella del equipo, dejó de lanzar tantos triples y disparos de media distancia y se concentró en postear y atacar la canasta, lo que permitió conseguir 40 puntos, 13 rebotes y 5 asistencias.

Esta pérdida es devastadora para los Nets, de los que se esperaba, como mínimo, una aparición en las finales. Entre Harden ($41.3 millones), Durant ($40.1 millones) y Irving ($33.5 millones) y los demás jugadores del equipo, el dueño de los Nets debe pagar 200 millones de dólares. Un dueño que pague esta cifra no puede permitir que su equipo sea eliminado en segunda ronda.

Sin embargo, debido más que todo a las lesiones, esa será la historia este año de los Brooklyn Nets. Un costoso súper equipo que se quedó corto.