Opinión sobre la debacle de Real Madrid y Barcelona
Después de la doble fecha de selecciones en Europa y Suramérica, regresaron las ligas con la confirmación de la pérdida de peso de los grandes de España. Real Madrid y Barcelona cayeron frente al Cádiz y el Getafe, respectivamente, y el liderato de La Liga está en poder de la Real Sociedad y el Villarreal.
Ya se volvió normal ver cómo los grandes de España no pueden superar a los equipos de la parte de baja de la tabla; ahora estos equipos se vuelven revelación con nóminas muy limitadas. Las rotaciones ya no le funcionan a Zidane. Con una plantilla parecida a la del 2016, hay figuras que ya no tienen su mejor nivel, como Marcelo, Isco, Lucas o Nacho, y que no logran un juego de equipo como el que tuvieron hace cuatro años. Esto se evidenció en un primer tiempo en el que el Cádiz le pasó por encima y lo pudo golear.
En la otra orilla las cosas no mejoran, y el Barcelona tampoco pudo frente al Getafe del ‘Cucho’ Hernández. Koeman apostó por darle juego a Dembélé y Pedri en el once inicial sin mucho éxito. Los catalanes no pudieron descifrar el juego que le planteó el Getafe, un equipo ordenado que es capaz de llevar estos partidos a su zona de confort logrando que el rival no encuentre los caminos ofensivos acertados. Eso le pasó al Barcelona, que generó tan solo tres ocasiones claras de gol.
Zidane le apuesta a la continuidad de su plan de juego con rotaciones y una plantilla que está muy lejos de su potencial. No quiso traer refuerzos de peso y prefirió dejar salir a dos dolores de cabeza, como lo eran James y Bale. El técnico ‘merengue’ apostó por darle toda la responsabilidad a Hazard y Benzema, esperando también la recuperación de Isco, que no aparece por ningún lado.
Koeman sigue sin encontrarle el puesto a sus jugadores. Lo de Griezmann es preocupante; el técnico le sigue dando confianza y le busca un lugar en el campo, pero el francés no se encuentra con su fútbol y se mantiene peleado con el arco rival. Ayer falló la ocasión más clara que tuvo el Barcelona en el partido. Por el lado de Dembélé las cosas no mejoran, y ya recuperado de su lesión sigue sin justificar lo que se pagó por él; no es ni sombra de lo que fue en el Borussia Dortmund.
Con este panorama, los espectadores y amantes del buen fútbol tendremos que seguir esperando la recuperación de Dembélé, Griezmann, Hazard e Isco, y que los entrenadores de los dos gigantes españoles encuentren la forma de cambiar el juego de sus equipos. Por ahora están muy lejos de lo que deben dar con las nóminas que tienen.
Tendremos que darle más tiempo a Zidane y Koeman para ver si sus apuestas de juego se consolidan y logran darle la vuelta a este panorama, que por ahora no pinta nada bien. El problema es que en sus equipos el tiempo no es un aliado, y no les queda mucho, pues ya se vienen los partidos de la fase de grupos de la Champions League.
Mientras esto pasa, La Liga de España seguirá siendo aburrida y nos tendremos que acostumbrar a ver a Granada, Cádiz, Getafe y compañía en los primeros puestos. Es un espectáculo muy pobre el que está dando la mal llamada “liga de las estrellas”.
En el fútbol nada está escrito, y es posible que todo cambie en una semana. Ojalá que así sea porque una temporada más viendo cómo se hunden el Real y el Barcelona es algo que los fanáticos de estos equipos no van a tolerar.
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